El pasado domingo 7 de octubre, mientras en Santa María Golf todavía se podía disfrutar de una agradable tarde bañada por el sol y en un campo en perfecto estado, los jóvenes de Santa María disputaron el campeonato de nuestro club. Los participantes se disputaban el premio consistente en el Trofeo Terry Wills, el resultado se decidió, como el año pasado, a través de una fotografía final.

En el tee 16 se encontraba David Schneider Jerez, 1 bajo el par de la tarjeta y sabiendo que estaba en una posición privilegiada para conseguir un trofeo. Sin embargo, en golf nada resulta tan simple. Bogey al 16, par al 17 y estaba al mismo nivel a un hoyo por jugar. Después de un gran drive y un excelente segundo golpe al último dejó un putt de 6m para birdie. 3 golpes más tarde firmó 1 sobre par 71, tuvo que asumir su situación y, sabiendo que podría ser una oportunidad desperdiciada, su única opción fue esperar.

El que fuera ganador en 2016, Fermín Palma Iri, se quedó atrás. Llegó a la competición con ilusión después de recuperar su estado físico tras someterse a una cirugía de rodilla que le hizo perder la primera parte de 2018. Terminó con un par, lo que le dejó 1 sobre el par. Rocco Repetto, quien el año pasado perdió un playoff, terminó un golpe detrás con 72, una situación frustrante que le hará tener que esperar otro año más para conseguir el trofeo. Después, volvimos al tee 1 para tiempo extra.

¿Conoces Santa María Golf? Como sabrás el primer tee se encuentra justo debajo de la barra. Es solo un par 4 corto (para estos jóvenes) pero puedes ver más agua que calle, es una buena prueba de concentración, especialmente cuando sabes que la mitad del club está mirando tus movimientos. No hace falta decir que los jóvenes de hoy en día son mucho más duros. Dos drivers salieron de la bolsa y dos bolas terminaron en la calle.

David tenía el mejor ángulo. El drive de Fermín se fue un poco a la derecha y dejó un delicado pitch de unos 70 m pero con la bola muy por encima de sus pies. Se veía bien en el aire, pero se acercó a unos 40 pies al hoyo, lo que apenas dejaba posibilidad para el birdie. David, un poco más cerca, a unos 50 metros de distancia, mandó la bola a unos 4 metros a la derecha de la distancia perfecta, era una buena oportunidad para aprovechar la situación.

Una ocasión que pudo aprovechar esta vez, compensando el error cometido 20 minutos antes. Se trata de una redención que muestra una elevada fuerza mental. Después de la ovación de la multitud, llegó el momento de la celebración y un cálido abrazo con Fermín. David, se mostraba orgulloso por el resultado y se convertía en el Campeón del Club Junior de 2018.

Como es tradición en el club, la entrega de premios se llevó a cabo junto a los adultos en la cena de gala. Desde Santa María Golf queremos felicitar al ganador,  y tenemos que felicitarlo, no solo por su juego sino por el discurso que pronunció frente a todos al recibir el trofeo de manos de Chrissie Wills.